Varkala, un oasis de descanso en la playa de la India

Desde Chennai fuimos a Varkala, un pueblo en la costa de Kerala para pasar las Navidades de vacaciones!!!

Para ello compramos billetes de tren y como siempre en el último momento… Pagamos unos 1800 rupias por dos billetes en sleeper… muy caro, pero el sistema indio hace que si compras billetes con el tiempo justo lo tengas que hacer a través del sistema Tatkal, y sale mucho más barato… es el último recurso para comprar billete a última hora en India y el más caro. Por si no lo he mencionado, en India los trenes siempre están llenos, por tanto los billetes de tren se deben comprar con tiempo por adelantado. Así que viajar de manera espontánea se convierte en complicado y más caro… De todas formas es como lo hacemos nosotros, y no vamos a cambiar, no sabemos de otra manera…

Después de toda una noche de traqueteo, llegamos a Varkala. Desde la estación fuimos andando hasta la playa, con las mochilas y el sol durante unos 2 km… Una vez cerca empezamos a ver los comercios más turísticos, estábamos cerca de la playa!!! En la calle principal preguntamos, y encontramos una guesthouse que no estaba mal por 400 rupias… Seguimos para ver si encontrábamos algo más cerca de la playa. Por casualidad nos topamos con el resort Aishana, a unos metros de la playa.

Hablamos con el dueño y resultó que hablaba español!!! Había trabajado muchos años en Canarias, y tenía disponibilidad. Nos hizo un buen precio por una habitación fantástica!!! El hotel tenía mucho glamour, todo limpísimo!!! El dueño, Bilal y su mujer francesa (que no recordamos su nombre… perdón), eran super agradables y su hija muy graciosa y simpática!! Pues allí nos quedamos todo el tiempo que estuvimos allí.

Varkala es una playa larga que está limitada por un precipicio, así que la parte más turística se encuentra al borde del acantilado. La avenida principal sigue todo el borde del acantilado y es perfecta para pasear, con numerosos restaurants, resorts y tiendas de souvenirs y bisutería. El lugar es muy bonito, fue una fantástica elección para las Navidades.

La oferta gastronómica es muy variada, desde comida india de todas partes, pizza buenísima y baratísima en Mamma champos, en Varkala Road, hamburguesas baratas en Little Tibet Restaurant, comida del sur de la India luy barata, 100 rupias (1,5 dólares) el plato de Dosa, y todo el pescado que quieras a precio razonable y muy fresco, en Clafouti Restaurant.

Un día, por casualidad, conocimos a Adriano, un siciliano que se dedica a encontrar buenas cosechas de café por el mundo, con él aumentamos la familia. Después conocimos a Cata, Ángela, Yoli y Cindy, un grupo de chicas de diferentes países, españolas y sur americanas, hiendo la familia aún más grande!! Y por último conocimos a través de Adriano, a Genarino, un gurú italiano, una persona singular, el último elemento que faltó para tener la familia completa, lista para las Navidades y fin de año!!!!

Así que los siguientes días los pasamos trabajando en el ordenador, pasando algunos ratos en la playa y compartiendo tiempo y actividades con nuestra nueva familia. Hicimos clases de yoga, y nosotros les hicimos un taller de clown. Fue muy divertido y enriquecedor…

Varkala es un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la playa y la buena vida… vida sencilla con algún lujillo de tanto en tanto…y Pizza!!!!!

Llegaron las Navidades, e hicimos una cena en el restaurant Clafouti, comimos pescado y bebimos cerveza!!! Nos hicimos amigo invisible y nos lo pasamos muy bien!!!! Fue genial, aunque echamos mucho de menos nuestras familias en Barcelona… sniff sniff…

Para fin de año cenamos en el mismo sitio, la calidad precio del pescado era buena. Después nos bajamos a la playa a beber unas cervezas y pasar el rato. En la playa había muchos grupos de indios algo borrachos, aunque el lugar parecía seguro, nos sentamos y estuvimos un rato con más extranjeros que andaban por ahí, cuando de repente apareció la policía a desalojar la playa, iban con palos, aunque nos echaron amablemente….

Así que el plan cambió, fuimos de fiestecilla a un bar-terraza musical, la música era bastante horrorosa pero había ambiente de fiesta. Y de allí a dormir, después de una buena noche con nuestra nueva familia!!!!

Después de un par de días dejamos Varkala, en tren hacia Dindigul, donde seguiríamos nuestro trabajo de voluntariado… Vuelta a la India profunda…

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